lunes, 25 de julio de 2011

(*)JULIO

Ríen. Bromean. Como una de esas parejas felices de estar juntos; de las que sueñan, para las que todo está aún por descubrir; de las que tienen un poco de miedo y un poco no... Como esa extraña sensación de cuando estás en la playa y hace calor. De repente te entran ganas de darte un baño. Te levantas de la toalla. Te acercas al agua. Te metes dentro. Pero el agua está fría. A veces muy fría. En ese momento, hay quien lo deja correr y vuelve a tumbarse y a soportar el calor. Otros, en cambio, se sumergen. Y tan sólo estos últimos, después de unas cuantas brazadas, alcanzan a saborear hasta el fondo ese gusto único y un poco extraño de libertad total, hasta de sí mismos.

domingo, 10 de julio de 2011

(*) PLAYA

Se pone el casco y se ajusta la ropa. Parte como un rayo, como suele tener por costumbre, esquivando por un pelo una bicicleta que pasaba por allí. Con los años, todo se vuelve más difícil. Nuevos Compromisos, otros conocidos, ritmos diferentes. Y a veces uno tiene la impresión de que se ha perdido, de que no ha dado la importancia adecuada a las relaciones. Los sms ya no llegan al ritmo de antes, las salidas nocturnas se reducen, las promesas de volver a verse se posponen por una razón u otra. El período del instituto, durante el que podían pasar juntas tardes interminables, parece haberse perdido en la noche de los tiempos. Eran como una segunda familia y no pueden dejar de creer en eso. Tienen que esforzarse. Defender las relaciones. Renovarlas. Tratar de atravesar el tiempo sin perderse. Pero bueno, lo cierto es que todavía estamos aquí.Dispuestas a dejarlo todo para poder vernos unas horas. Qué maravilla. Tengo muchas ganas de pasear, de reírme sin más, de comer con ellas un buen helado. Sí. esboza una sonrisa.


sábado, 9 de julio de 2011

(*) Me pillaste desprevenida...

No podría decir qué momento, qué lugar, qué mirada o qué palabra sirvieron de base. Hace ya demasiado tiempo. Lo que sí sé decirte es que para cuando me di cuenta ya estaba metida hasta el cuello.



viernes, 8 de julio de 2011

(*) tiemblas solo con mirarlo

ya no sabes lo que es ni cómo llamarlo.


Yo creo que lo mejor que tenemos es el amor, ese misterioso poder que sale de nuestros cuerpos. No hay nada más hermoso que pueda sucedernos, el amor como la música, como la pintura, como los libros... no se busca, se encuentra. El amor es como la risa, cuando llega no hay quien pueda resistirlo. Cuando te da el amor, cuando te da la risa todas tus defensas se hacen pedazos. No hay dinero en el mundo para poder pagar el amor de una pareja. El amor es la mayor recompensa que tenemos las personas por estar aquí, aunque a veces, deje una herida en el alma de por vida.

Julio, sabiendo cómo acabará todo...



martes, 5 de julio de 2011

(*) Reencuentros y confidencias

-¿Sabéis lo que me apetece hacer en este momento?
-No.
-Un brindis... Un brindis por la única cosa que perdura en el tiem­po, la única cosa inoxidable..., que resiste tanto a los éxitos como a los fracasos..., a los vendavales de la vida... Un brindis por la AMISTAD.