miércoles, 28 de marzo de 2012

(*) She loved before, she may love again


"You may not be her first, her last, or her only.
 
She loved before, she may love again. But if she loves you now, what else matters? She's not perfect, you aren't either, and the two of you may never be perfect together. But if she can make you laugh, cause you to think twice, and admit to being human and making mistakes, hold onto her and give her the most you can. She may not be thinking about you every second of the day, but she will give you a part of her that she knows you can break - her heart. So don't hurt her, don't change her, don't analyze and don't expect more than she can give. Smile when she makes you happy, let her know when she makes you mad, and miss her when she's not there." 
-Bob Marley

 

miércoles, 7 de marzo de 2012

(*) 7.03.2012, À bientôt

Hay cuatro palabras que son mucho mejores que decir "Te quiero", esas palabras son "Estoy aquí para quedarme".

(*) Momentos

  Y en un momento determinado no sé ni cómo ni por qué sentí que su mano me decía ” A ¿si?, si ¿estás seguro?” y mi mano le respondió ” Si estoy seguro me apetece y siento que a ti también te apetece”. Sentí que su mano me apretaba más fuerte…a ella también le apetecía. Es curioso lo intensos que son esos momentos tan tontos, algo que no dura más de 12 segundos de tu vida y que te queda grabado para el resto de tus días… En el cine la mayoría de historias de amor acaban ahí lo mejor de una historia es no contar como sigue y precisamente esa es la parte más interesante….

 

sábado, 3 de marzo de 2012

(*) FEBRERO

El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una, pero aunque se parezcan, los miedos son tan personales y tan diferentes como pueden serlo todas las familias del mundo. Hay miedos tan simples como desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprende a ir conviviendo; hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos atrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla, miedo a que nadie entienda lo que queremos ser. Hay miedos que nos va dejando la conciencia; el miedo a ser culpables de lo que les pasa a los demás. Y también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos mirar, a lo desconocido... como el miedo a la muerte, a que alguien a quien queremos desaparezca.


Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien, a veces cuesta, pero cuando empiezas, lo único que tienes que hacer es seguir, sin dudar. Y de repente te das cuenta de que el miedo ya no te pertenece, ha desaparecido, como esa ropa que un día dejas de usar...